
Las chicas tuvieron un año espectacular. Y acunan sueños que asustan de cara al próximo año, especialmente si se tiene en cuenta no solo su potencial, sino lo que han demostrado que pueden hacer.
Martina Rivas es una de ellas. La levantadora de potencia fue una de las que la rompió en 2024, y proyecta con todo este 2025 que recién da sus primeros pasos.
Hablar de Martina es mucho más que decir que ganó todo lo que disputó en 2024, que es campeona sudamericana, federal y nacional, y que se aburrió de hacer récords no solo en su categoría, la Sub Junior, sino también en la Junior.
El dato que resume todo: la deportista sanducera está a 10 kilos de alcanzar el récord mundial en sentadilla de su categoría.
“El que pasó fue un año espectacular. Comenzamos recién en junio a competir, en el Federal, y fui campeona y con mejor coeficiente de Sub Junior en potencia y banca”, pero además ya estableció tres récords. El año, estaba claro, pintaba de la mejor manera.
Hay que tener en cuenta que Martina Rivas comenzó a competir en la disciplina en 2023. Y que el crecimiento en un año fue notable, teniendo en cuenta que en aquel año solo tuvo un torneo.
El segundo de su carrera fue el Federal de 2024, en el que se superaron los objetivos y se consiguió el pasaje al Sudamericano.
“Fui llena de miedos, pero con ganas de pelear por algo bueno más allá de que ya estar en un Sudamericano era todo un logro. ¡Y era recién mi tercer torneo!”, recordó.
“Hicimos lo que planeamos, planificado, y hasta un poco más”, dijo. Y tiene razón: no solo se quedó con el título de su categoría sino también estableciendo el récord sudamericano en sentadilla. Y, de paso, varios récords nacionales.

“En ese momento miré hacia atrás y sentía que me lo merecía por todo, no solo por el deporte. Fue sin dudas una de las cosas más lindas que me pasó en el año”, reconoció.
Después vino la preparación para el Nacional, y apareció una lesión que complicó las cosas (“era mi primera lesión y tenía miedo”).
“La fui llevando. Trabajando en la recuperación, pero también avanzando. Me costó mucho decidir si ir al Nacional o no, porque tenía temor. Pero fuimos y salió todo redondo”.
Es que, como dice su entrenador, Diego Martini, en el Nacional “se logró algo épico”: títulos, récords nacionales de todo tipo y color, y ese rendimiento enorme que llevó a que se ubicara a solo 10 kilos del récord del mundo en sentadilla. Tuvo, entre tanto logro, el primer puesto en coeficiente Sub Junior en potencia y el segundo en banca.
“Cerré el año de una forma muy linda. Y me ayudó mucho el mirar hacia atrás y ver lo que había mejorado. La mejora en kilos fue increíble, porque en 2023 hice 330 kilos de total y en este Nacional hice 411”, repasó Martina.
“Estoy muy agradecida a la vida por darme la oportunidad de cada día ser mejor que ayer. Pero me doy también las gracias a mí, por no frenar. El año me sorprendió de muchas formas, también fue el último del liceo, por lo que cerré otra etapa”, dijo ya haciendo un balance más personal que deportivo.
Reconoció, a lo largo de ese repaso, que nada fue fácil. “Complicado porque quería darle de lleno a todo y a veces me sobrepasaba. Porque también tengo mi emprendimiento. Pero donde más le ponía era al powerlifting, que me ayudó muchísimo a manejarme en todo sentido”, confesó.
Todo quedó atrás. 2024 fue el año del gran salto, pero “ahora estamos pensando en grandes cosas, como el Mundial de 2025 o algún otro torneo internacional más allá del Sudamericano”.
Este año que recorre sus primeras horas estará cargado de cosas. Pero está lo de siempre: “hay que recaudar bastante dinero, pero estoy viendo la forma de crecer y ver qué podemos hacer” para seguir pisando fuerte en el powerlifting.