
“El que pasó fue mi mejor año: no me lo voy a olvidar jamás. Y sin dudas que jugar el Mundial fue lo máximo”, resumió la bochófila Karen Sanguinet sobre su gran 2024, pero ya pensando en la nueva temporada.
Sanguinet remarcó que “a nivel local pude tener logros departamentales y nacionales que son gratificantes, porque una entrena todos los días para alcanzar resultados. El año pasado se lograron varios, y sin dudas fue mi mejor año”.
Pero hay que pensar en lo que se viene. Karen, por lo pronto, tiene muy claro que “mirando hacia 2025 la vara quedó muy alta”.
Los objetivos son varios, aunque este año no habrá Mundial, “que es cada dos años”. Igualmente, “tenemos el objetivo de lograr los Departamentales en femenino y ver si con mi hermano (Jhonny) podemos ganar en mixto. Y sin dudas apunto como siempre a poder ganar algún Nacional en cualquier modalidad, o al menos estar en el podio, que siempre es bueno”.
El año que pasó fue positivo por todos lados. Títulos panamericanos, mundiales… Y se alcanzó además un objetivo no pensado, que llegó de arriba: se alcanzó difusión.
“La bocha tuvo más repercusión y eso es lindo. Algunos saben lo que es la bocha, pero no saben lo importante que es, que se juega a nivel sudamericano y mundial. Eso la gente no se lo imagina”, indicó la sanducera.
Y rescató que “los juveniles ya habían tenido muy buenas actuaciones en el Panamericano y Mundial, y después seguimos nosotros junto a Facundo (Fierro). Lo lindo es que venimos muy bien a nivel internacional, lo que marca que la bocha de Uruguay va mejorando, pese a que no hay apoyo. Pero con esfuerzo y sacrificio, trabajamos para mejorar e ir logrando objetivos”.