
La rompen con la ovalada, pero dejan en claro que con los pies se revuelven de mil maravillas y pueden marcar la diferencia.
De la tierra de donde los niños nacen con una pelota bajo el brazo se sorprendió al mundo del rugby por partida doble, en 2023 y en este 2025. Y las dos veces fue por parte de sanduceros: primero Guillermo Lijtenstein y hoy Dante Soto, en ambos casos en el Circuito Mundial de Seven.
En 2023, año en el que Los Teros 7 debutaron en el Circuito, la jugada que protagonizó Lijtenstein ante España en Sydney recorrió el mundo y le valió al jugador de Trébol recibir felicitaciones de todos, incluyendo el capitán de Nueva Zelanda.
“Nunca pensé esa jugada. Fue por instinto. Fue una salida, hay un rebote y en ese momento la voy a buscar junto al español. Quiero agarrar la pelota, me queda alta y lo primero que atiné es a cabecear la pelota. Iba corriendo por la raya y cuando me pensé que se iba y el español me iba a tacklear, le pegué con el pie”, dijo hace algunos días a medios internacionales.
Hoy pasó algo similar. Otra vez como protagonista un Tero 7, y sanducero: Dante Soto. La ovalada al aire, Uruguay no la pudo controlar y cuando un jugador de Fiji fue a hacerse de la pelota, Soto la punteó con el pie, avanzó a toda velocidad y volvió a ganarle con el pie a un rival que atinaba a controlar el útil con la mano. Así, con esa receta, siguió corriendo en cuarta a fondo y marcó el primer try del partido.
Es rugby al más alto nivel, pero estos dos sanduceros sorprendieron al mundo mostrando que tienen en los pies la marca país. Y sí: los dos hicieron fútbol de chicos. Dante, por ejemplo, jugó en Progreso y San Miguel.
Mirá la jugada de Lijtenstein y la de Soto: